REFLEXIONAMOS Y LE DECIMOS BIENVENIDO AL 2024

 

¡Hola a todos! Esperemos que todos hayan tenido un lindo arranque de año. En la Chacra, siempre que termina un año, nos gusta mirar hacia atrás y reflexionar sobre nuestro trabajo en este lugar tan especial. Un año más de nuestra querida Chacra, un año más de aprendizaje y emociones vividas.

Nunca nos deja de asombrar lo mucho que ha ido cambiando la Chacra durante sus 25 años de existencia. Si bien desde sus orígenes se intentó tener un enfoque centrado en los niños que nos visitan, esto se ha ido vuelto cada vez más importante para nosotros. A fin de cuentas, ¿qué es la Chacra sin esas mentes inquietas que nos visitan? Como docentes de este lugar apostamos cada vez más en el quehacer de los niños. La Chacra es un espacio para dejar volar la curiosidad, para entender que la naturaleza nos ofrece todo y por ello es importante conocerla para amarla. Como docentes de la Chacra tenemos la tarea de nutrir la curiosidad de los niños, permitiéndoles descubrir, experimentar y aprender desde sus propias inquietudes. Reconocemos la riqueza de la naturaleza y la importancia de preservarla, aprendiendo niños y adultos a apreciar cada elemento, desde las hojas hasta las piedras, como portadores de secretos fascinantes.

En las primeras etapas de nuestra vida, el mundo es un lienzo expansivo de misterios y maravillas esperando ser descubiertas. Como adultos, a menudo pasamos por alto la magia que existe en lo cotidiano, dando por sentado las complejidades de nuestro entorno. Pero para los niños, cada sombra en la pared, cada susurro en los arbustos, cada textura, color y sonido representa una oportunidad de exploración. Esta insaciable sed de conocer, tocar, experimentar, no es más que la forma más pura de curiosidad. Los niños perciben el mundo que les rodea a través de esta curiosidad natural, impulsándolos a emprender un viaje incansable de exploración, descubrimiento y aprendizaje sobre el vasto universo en el que se encuentran. Nuestro rol como docentes implica aprovechar este hermoso recurso que tiene cada niño, encauzándolo hacia distintos temas o proyectos que se quieran trabajar. Son tantas las interrogantes que pueden llegar a surgir que muchas veces nos puede suceder de no tener las respuestas para todas, pero eso no está mal. Si bien en la Chacra intentamos atender a muchas de esas interrogantes que vienen o que surgen durante nuestras recorridas, está bueno que también sea un espacio que genere más interrogantes. La naturaleza es maravillosa, pero muy compleja y diversa, por lo que todos los días aprendemos algo nuevo.

El cierre de este mensaje sobre la Chacra es un recordatorio de la importancia de valorar la curiosidad innata de los niños y cómo esta cualidad impulsa un aprendizaje continuo y una apreciación más profunda de nuestro entorno. A lo largo de los años, la Chacra ha sido un espacio que ha evolucionado junto con las mentes inquietas que la visitan, priorizando el enfoque en los niños y su exploración del mundo natural que los rodea.

Finalmente, no podemos terminar este post sin agradecer a todas las instituciones y a todos los educadores que nos eligen y confían en la Chacra. Para nosotros es un honor que vean en este espacio un lugar de aprendizaje y disfrute para esas mentes inquietas. De corazón, ¡muchas gracias!